En la Comunidad Valenciana se prohíben los baños en zonas que no se pueden controlar durante el proceso de desescalada para combatir el coronavirus

La Comunidad Valenciana ha decidido prohibir el baño en piscinas y ríos en los cuales no se pueda garantizar la seguridad sanitaria. Así pues, si el ayuntamiento al que pertenece dicha área no puede controlar la capacidad y la distancia de seguridad de los bañistas, se verá obligado a cerrar esos espacios de baño hasta nuevo aviso.
Por eso, la alcaldesa de Bugarra comenta lo complicado que es mantener las medidas establecidas en lugares tan recónditos y, por eso, no los pueden controlar. “No tengo presupuesto para contratar gente y ¿cómo voy a controlar los cinco accesos?”, explica haciendo referencia a que no tiene más opción de cerrar las zonas de baño.
En cambio, otra situación muy diferente se da en Galicia. La autorización para bañarse en piscinas y ríos depende del municipio al que pertenezca aunque, en el Parque Natural de A Barosa en Barro en Pontevedra, la gran mayoría de la gente decidió mantener la piscina abierta y se ha prohibido su baño hasta que se decrete el fin del estado de alarma.
Por tanto, en las tres provincias valencianas las charcas, ríos y lagos, entre otros, los cuales no puedan ser gestionados por su ayuntamiento de forma segura, permanecerán clausurados probablemente durante toda la temporada de verano. Así pues, si no se puede garantizar las medidas de seguridad propuestas por el gobierno, no se permitirá el uso de las instalaciones y, por eso, habrá que esperar al año que viene para poder disfrutar de estas áreas recreativas. Siempre y cuando la próxima temporada de verano el virus esté controlado y se pueda garantizar la seguridad de los bañistas.