A nivel mundial casi uno de cada diez trabajadores labora 55 horas semanales sino más. En una semana laboral de cinco días, eso equivale al menos 11 horas de trabajo al día. Hay estudios que comprueban que este exceso de horas de trabajo se puedo volver enfermizo. Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) han realizado su primer análisis global sobre el tema.
Se han analizado detenidamente las horas de trabajo en todo el mundo y el riesgo de morir por enfermedad cardíaca o accidente cerebrovascular. Según Frank Pega, un epidemiólogo de la OMS en Ginebra, afirma que el estudio demostró que había un mayor riesgo para las personas que trabajaban más de 35 a 40 horas a la semana. El estudio estima que en 2016 hubo aproximadamente 745.000 muertes por enfermedades cardiovasculares causadas por sobre carga de trabajo. Desde el año 2000 la cifra aumento un 29%. Las personas más afectadas son las de mediana edad y mayores, que a partir de sus 40 años han trabajado demasiado. Pega explica que tienen que transcurrir al menos 10 años para ver las consecuencias de largas jornadas laborales.

745.000 Muertes en 2016
Para sacar las cifras de este análisis los expertos de la OMS y la OIT juntaron los datos de 2.300 encuestas de más de 150 países y las conclusiones de casi 60 estudios. Según el estudio, los daños a la salud derivados de las largas jornadas laborales son básicamente los mismos para hombres y mujeres. Sin embargo, las muertes entre los hombres son más llamativas, ya que en muchas regiones del mundo el trabajo en el hogar sigue siendo cosa de mujeres y no se registra en las estadísticas.
Según el epidemiólogo Pega, el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares por exceso de trabajo es especialmente alto en la región del Pacífico Occidental y en el sudeste asiático, pero también en África y Sudamérica. Por otro lado, en Europa y Norteamérica las sobrecargas de horas de trabajo no son tan grandes. Esto se puede explicar con el hecho de que en Europa existen directrices de seguridad y salud laboral especialmente estrictas, que al parecer se cumplen y se vigilan en ese sentido.

A lo largo de la pandemia, el riesgo para la salud de muchos ha aumentado debido a un cambio considerable en el mundo del trabajo: el teletrabajo conocido como Home Office. Los límites entre lo que es el tiempo de trabajo y lo que es el tiempo con la familia y también el tiempo de descanso se están volviendo cada vez más difusos. En este sentido la Organización Mundial de la Salud y la Organización Internacional del Trabajo reclaman que se establezcan normas para promover la salud. Aunque el teletrabajo existía antes de la pandemia, la crisis sanitaria ha cambiado por completo el concepto del teletrabajo y sus consecuencias.
En conjunto, los gobiernos, los empresarios y los empleados deben adoptar medidas para proteger la salud de sus trabajadores. Tedros Adhanom Ghebreyesus, el director general de la OMS, esta convencido que ningún trabajo merece el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca.